viernes, 20 de agosto de 2010

Guadalajara agridulce

He decidido retomar mi blog.

Creo que es un lujo que debo permitirme ya que es algo que me divierte e interesa mucho como proyecto. Todo lo que va de este año me sometí a mi mismo a un ritmo workaholico de vida en el cual por supuesto no había tiempo que perder para ponerse a vertir estupideces y todavia tratar de que tuvieran una hilación lógica y que dieran risa, Malamente.

Confieso que al ver el contador que instalé para saber si alguien en el mundo visitaría las crónicas tapatías y comprobar que tiene más de 1400 visitas me puse a pensar en como chingados ocurrió tal cosa, y terminé con el ego acariciado y orgulloso de algo extremadamente impreciso. Sé que el facebook ayudó bastante, y ahora que lo odio me cuestiono si postear nuevamente cada nueva crónica en esa chingadera del demonio, cosa que seguramente haré ya que si bien lo odio y cerré mi cuenta por lo menos 4 veces, también me doy cuenta que la adicción que causa toda la estúpida tecnología es mayor de lo que los que nos embarcaron en ella pensaron alguna vez.

Fuí presa también del terror que se siente al sentarse ante la pantalla en blanco y descubrir que mis ideas y vivencias acerca de vivir en guanatos eran quizá demasiado limitadas. Se acabó el chiste fácil, el humor negro y el sarcasmo que confieso arrancó alguna que otra risa en mí y en algunos otros lectores de este experimento. En buena parte también por eso suspendí la escritura

Debo también decir que este blog estuvo a punto de convertirse en un blog sobre comida y restaurantes, pinches gringos con su colonizacion cultural a traves de la tele, pero al final tuve la congruencia interna de volver a lo que originó este ejercicio aunque Algún día haré ese blog gourmet estoy seguro.

Tuve miedo de que lo escrito no fuera lo suficientemente bueno y ahora lo digo sonoramente: ! a la mierda con todo esto! voy a escribir lo que pueda, cuando pueda ya que a fin de cuentas el propósito inicial nunca fué ser una pinche lumbrera literaria. en el siguiente párrafo recupero para tener muy presente el primer post en donde inaugure solementemente este honorable espacio :


- Describir mis vivencias como habitante de la metrópoli, desde un punto de vista relajado y anecdótico.

- poner un post mínimo por semana



Una vez terminado este paréntesis onda nena delicada y cursi, que a nadie le importa un pito estoy seguro, más que a mí. ( Lo bueno es que es mi blog así que puedo postear lo que me dé mi chingada gana) Acompáñenme al post de hoy que trata acerca de la Guadalajara agridulce que hoy me da por sentir cuando salgo a la calle.


Guadalajara Agridulce


Despúes de tanto tiempo de vivir en Guanatos, y haber pasado por largas temporadas en que la odié intensamente, ahora me descubro contento de vivir aquí y apreciando las muchas cosas chidas que la ciudad tiene y poco me doy la oportunidad de apreciar cotidianamente.

Si bien es muy difícil pasar por alto el pésimo diseño urbano, la contaminación rampante de aguas y cielos, el tráfico de mierda que se ha vuelto el tema número uno de conversación y la actitud pusilánime y retrógada de la mayoría de sus
moradores, Guanatos tiene un no se qué que a mi la verdad me gusta bastante.



Nos hemos vuelto, a nuestro pesar, una ciudad enorme con todo lo positivo que esto trae. Empezamos a experimentar el anonimato liberador de vivir en una ciudad de millones de personas, contrastando con el pasado en el cual Guanatos era un pañuelo y todo el pinche mundo estaba emparentado o se conocia de alguna manera entre si. Con su permiso voy al baño a vomitar y regreso.....

cada vez más puedo decir que en Guanatos hay de todo, en cuanto a personas e ideologias diferentes, cosas raras y cosas conservadoras, diversiones e intereses para todo tipo de conciencias.

Ahora pugnamos por ser de nuevo un pueblo bicicletero, pero esta vez con conciencia y dignidad y como alternativa a la tiranía del automóvil.

Hay un chingo de árboles y cada vez se come mejor.( La sección de comida callejera es magnífica)

Guadalajara me da risa, mucha risa.


Fuimos desde los 80´s una narco ciudad modelo, donde pasado el periodo inicial de violencia, todo fue miel sobre hojuelas. siempre hubo maletas llenas de dólares para lavar, mucha prosperidad y pocas de las desventajas de tener asentado el fenómeno de manera completamente acordada y cuasi legal.

Ahora que aparece gente embolsada y descuartizada por las esquinas es que pretendemos estar sorprendidos y poner el grito en el cielo. Todas las personas que conozco tienen alguna teoria sobre lo que esta ocurriendo en la " plaza" unas teorias son mejores que otras, pero a todos nos encanta chismorrear cual patys chapoys del tema, en el cual nadie sabe nada y a todos nos fascina el morbo.

La cultura es propiedad de una sola persona, y de su grupo, asi como la educacion superior estatal. Emilio y sus compinches panistas tratan con muchisimo éxito de apoderarse de todo lo demás, hay unas cuantas familias ricachonas jetseteras que le dan tambien color a la ciudad, y por supuesto, del lado de la perrada millones de personas que la pasan pesimo económicamente, pero tienen a su familia y siempre a la mano una risa sincera o una caguama con su torta ahogada y una tele para evadirse viendo el futbol. Todo esto bajo el manto de la iglesia católica, que domina completamente a los arriba mencionados, comandada por el cardenal, persona de exquisitos valores y maneras. Casi Olvido mencionar a los ricos nuevos y sus estadios de fútbol qeu obtuvieron vendiendo polvitos nutritivos que le dan un toque aún más irreal.


Guanatos es un pinche coctel irreconciliable de elementos que al final lucen bien y no saben del todo mal. como coexistimos en relativa paz es algo que aún me sigo cuestionando. Es como una especie de dolor soportable del que no te puedes deshacer y que de tanto tenerlo te acaba gustando. No cabe duda que la línea entre el dolor y el placer es muy delgada acá en tapatilandia.

A mi lo que más me gusta es salir a la calle a ver a los tapatíos interactuar y mezclarse unos con otros, juro que es mejor que ir al cine o al teatro. Aqui encuentras personajes increíbles como salidos de un libro raro o un cuento de ficción. Aquí el surrealismo se da a flor de piel, en los colores, en la comida y en la psique de la gente.

Ahora me quejo mucho menos de Guanatos y trato de exponer a mis hijos lo más posible a esta Guanatos agridulce que me cobija y a la que pertenezco casi con orgullo.

Acabo de recordad lo complejo que es escribir una crónica y estoy tratando de no latiguearme por el resultado, sino congratularme por estar nuevamente online.

proximo post sobre el futbol.

2 comentarios:

  1. Hola!

    Interesante forma de ver a la ciudad: agridulce y en un extraño equilibrio.

    Felicidades por el regreso, me gusta tu blog y prometo estar leyendo cada semana tus textos.

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