jueves, 8 de marzo de 2012

Crónica de la esperanza y el museo de cera.

Finalmente la vida me regala unos momentos de paz y concentración para manchar de tinta simbólica esta pantallita blanca, en horas pagadas por los gringos, para ser fiel a la filosofía de este blog tan suave y tan cuasi terapéutico para este valedor que hoy escribe.

Los que tienen la dicha enorme de conocerme saben que últimamente me ha pasado chingadera y media, y que la vida no siempre es fácil y todo ese discurso de psicología de plástico desechable tipo sanborn´s, y que seguimos adelante a pesar de las vicisitudes. Siempre adelante como cabras sin mecate, como una especie de ave fénix que renace de las cenizas después de quedar hecha cagada, y de manera necia vuelve a vivir, con la misma ilusión cada vez, entusiasta hasta el final,llena de esperanza.

La vida es cabrona y dura muy poco; Si se te olvida eso ya valiste madre ipso facto.

Antes de ponerme a filosofar estilo gaby vargas o a escribir para señoras como el tal dehesa ese, prefiero no ponerme ya tan sentimental porque me salen caros los klinex en el superama goei...... y relatarles una crónica tapatía de las de antes.....pero ahora con esperanza de que las cosas irán bien en el futuro.



El museo de cera de guanatos


Últimamente nos ha dado por visitar el museo de cera que está en el mero centro de este ilustre rancho azul en el que vivo.

El museo está chingón, bien puesto, todo con madre y hasta barato sale. La experiencia completa saldrá con todo y souvenir ( del que hablaremos más adelante)en más o menos 180 pesos por 3 pelados.

Naturalmente sigo yendo por que a mis hijos les encanta, y yo soy como una especie de títere gigante, complaciente siempre. Ellos me manipulan a su antojo y ¿Yo? encantado de la vida.

Antes de tener hijos el centro me parecía un lugar peligroso y maloliente y por su puesto jamás conocí el pinche museo. Por cierto que sigue siendo peligroso y maloliente igual que siempre.

Lamento interrumpir esta crónica, pero acaba de irse el guey que se cree mi jefe, y no lo es, a ponerme una fecha límite para un proyectil que traemos, pero que URGE y todo ese cotorreo el cual ya no le creo nada, y lleva queriendo ser mi jefe como 12 días.... pinche raza neta, ya mejor no digo cosas que me rompan el zen y sean poco compasivas.

Retomando el hilo, el museo de cera está en el mismo edificio del museo Ripley que la neta no tengo el gusto de conocer aún, pero en un descuidito estoy seguro que iremos y quizá nos dé " carnita" para un post decente.

El guey que vino a mandonearme hace 10 minutos gana 5 veces más que Yo, y lo sé de facto, me cago en la puta cadena alimenticia. Ahí va mi zen a la basura gracias por todo.

El souvenir que uno obtiene es una mano de cera que uno fabrica usando su propia extremidad para que después lo pinte la señorita de los colores y formas que a uno más le plazcan.Una verdadera delicia visual y táctil ya que la cera está caliente y quema bien ricolino.

En la sala de mi cueva, que es su cueva, están 3 manos de cera, la mía, la de k y la de p, y constituyen un adorno de lo más groovy.

B también ya quiere ir al centro maloliente para tener su propia mano de cera, ah como quiero a mi señora...

La vida es cabrona, pero también es chingona y uno decide que tipo de película se quiere recetar.

He dicho.

Yo opto por tratar de mantenerme positivo y por aprender a fluir con el momento presente y lo que la vida me presente, sin quejarme tanto ni tan duro. Bien new age el pedo y qué?.

Al cabo para eso está el museo de cera y los domingos bien temprano por la mañana para gozar de un paseo bien tapatío edá ey si si.

Creo que para haber estado tanto tiempo sin escribir no salió del todo mal.


Apoyen al autor y dénle su opinión que tiene un ego muy grande que alimentar. dejen un comment de menos no?

3 comentarios:

  1. Así pasa cuando sucede con los blogueros... Te debates entre plasmar tus emociones, tratar de autoterapiarte o escribir sobre lo que realmente quieres contar. Si lo sé yo... Bueno, ando buscando blogs decentes para intercambiar comentarios y reinsertarme en la blogósfera. Espero te des una vuelta por el mío y acuses recibo de que por ahí anduviste...

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  2. Me agrado su falta de filtro, a veces no escribimos lo que queremos por tratar de mantener la estética y a usted no le molesto admitir que perdió su zen..

    Igual que el comento arriba, estoy checando varios blogs decentes pues voy comenzando con el mio.. Espero dedicarle el tiempo que se merece

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